Se regularizaron $ 49.700 millones en la moratoria de la AFIP

La recaudación sumó $ 7267 millones hasta ahora; desde abril se endurecerán las condiciones; el organismo calificará a los contribuyentes.
Hasta ahora, la moratoria impositiva que corre paralela al blanqueo logró la adhesión de 225.000 contribuyentes, que declararon una deuda de $ 49.700 millones, lo que le permitió recaudar a la AFIP $ 7267 millones por el ingreso de pagos a cuenta y algunas cuotas ya vencidas. Los resultados parciales de la moratoria establecida por la ley de sinceramiento fiscal fueron informados ayer por el director ejecutivo del organismo tributario, Alberto Abad. A diferencia de la recaudación proveniente del blanqueo, el importe percibido no está afectado a la reparación histórica para jubilados y pensionados.
El importe que ingresó a la moratoria se compone en un 67% por deuda nueva (que no estaba ingresada en planes anteriores) y el resto por reformulación de planes e incluso deuda en instancia judicial.
"Aunque el momento para evaluar el resultado del plan de pagos es marzo, cuando finaliza el plazo para adherirse , esta cifra es un éxito", comentó a LA NACION el tributarista César Litvin. En el mismo sentido, agregó que la deuda regularizada es de difícil detección para el fisco e implica lo que técnicamente se conoce como un cambio de stock por flujo, es decir, el Estado cambia una deuda que no le genera rédito por un flujo periódico de ingresos.
"El monto recuperado mediante la moratoria puede interpretarse como un atenuante a la baja recaudación en términos reales de 2016, ya que permite ingresar la deuda originada en las declaraciones juradas de 2015", remarcó Litvin.
Una de las características principales de la moratoria que rige hasta marzo es el descuento del 15% que se aplica para el pago de contado. Los contribuyentes deben realizar un pago a cuenta del 5% de la deuda y luego cancelar el saldo en 60 cuotas mensuales, con un interés del 1,5% mensual. Para las micro y pequeñas empresas, el pago a cuenta es del 10% y el saldo se abona en 90 cuotas mensuales a la tasa pasiva promedio del Banco Nación (hoy en 1,37%). Las empresas medianas y grandes cuentan con beneficios similares, pero se les exige un pago a cuenta del 15% de la deuda y una tasa de interés mínima del 1,5%, tomando la misma tasa de referencia.
Para aquellas empresas que se encuentran en emergencia o desastre agropecuario, no rige pago a cuenta alguno y la deuda se cancela en 90 cuotas mensuales a una tasa del 1% mensual.
Cambio de reglas
"A partir del 31 de marzo las condiciones van a ser mucho más duras para aquel que decida no pagar", anunció Abad en conferencia de prensa. "Se termina la fiesta", sentenció. En lo que respecta a futuros planes de pago, aunque no brindó más precisiones, adelantó que las tasas de interés serán superiores a las del sistema bancario, sin condonaciones y con la posibilidad de que se exijan garantías para montos relevantes.
Consultado al respecto, Litvin señaló: "Me parece correcto que la tasa de interés sea levemente superior a la del sistema bancario, porque de otra forma el contribuyente deja para lo último el cumplimiento de sus obligaciones fiscales".
"De todas formas -agregó-, es importante que exista un plan de pagos permanente, puesto que en muchas ocasiones las empresas chicas atraviesan dificultades, como una baja en las ventas, y no pueden cumplir en tiempo y forma. Si a esto le sumamos que muchas de ellas no tienen acceso al sistema financiero, se les torna imposible pagar", concluyó.
Otra de las novedades anunciadas por la AFIP es la implementación de un sistema de ponderación de riesgo para los contribuyentes, que traerá beneficios o castigos según corresponda. Calificará a personas y empresas dentro de cinco categorías que van de "muy buena" (letra A) a "muy mala" (letra E) en base a más de 20 parámetros de cumplimiento. A la fecha sólo la mitad del padrón de contribuyentes se encuentra en situación de cumplimiento normal.
Antes de fin de mes, cada persona o empresa podrá consultar de qué manera ha sido calificada por la AFIP e incluso podrá pedir una revisión si la considera injusta.