Se derrumba el consumo y noviembre cierra con la peor caída del año

La recesión todavía no encontró su piso y noviembre cerró con la peor caída del año en las ventas de los productos de la canasta básica. La demanda de alimentos, bebidas y artículos de tocador y limpieza sufrió el último mes una caída interanual del 5,9%, según la medición que realiza la consultora Scentia, tomando en cuenta las ventas de supermercados y autoservicios independientes.
La baja de noviembre fue la más pronunciada del año y para encontrar un antecedente mayor hay que remontarse hasta febrero de 2017, cuando el consumo sufría el impacto de otra disparada del dólar.
Pese al fuerte retroceso del mes pasado, en el acumulado de los primeros once meses del año el consumo muestra un descenso relativamente menor (-1,3%) como producto del buen desempeño que tuvieron las ventas en el primer trimestre de 2018. El consuelo para el Gobierno es que todo indica que el año cerrará con una caída menor a la de los dos años anteriores, lo que paradójicamente lo convertirá en el mejor año (o al menos en el menos malo) para el consumo en la era macrista.
"En esta oportunidad creemos que entender el contexto es más importante que focalizar en situaciones puntuales y, en este sentido, debemos tener presente que hasta junio el salario le presentaba batalla a la inflación, pero luego de ese mes, el gap entre estos dos indicadores se separó afectando directamente el poder de compra de la gente", destacó Osvaldo del Río, director de Scentia.
Por rubros, la caída no perdonó prácticamente ningún rubro. Con la solitaria excepción de bebidas con alcohol (que tuvo una suba imperceptible de 0,1% en las ventas), todas las categorías cerraron con números en rojo en noviembre. Los mayores retrocesos se dieron en "limpieza de ropa y hogar" (-9,6%) y "bebidas sin alcohol" (-7,9 por ciento).
Los que más pierden
En materia de canales, como se viene repitiendo en los últimos meses, los más golpeados resultaron los pequeños autoservicios y comercios independientes. Entre estos locales, la baja en las ventas en noviembre se ubicó en el 8,5% en unidades frente al -3,7% con que cerraron las grandes cadenas de supermercados, lo que implica que los jugadores más grandes están recuperando algo de la participación de mercado que habían perdido en los últimos años.
Otro factor que se viene repitiendo en los últimos meses es que la recesión está golpeando con más fuerza a los comercios en el interior del país. En noviembre, las ventas de los productos de la canasta básica cayeron en promedio un 3,4% en la Capital Federal y el Gran Buenos Aires contra el 7,6% que retrocedieron en el interior.
Por su parte, en el acumulado del año los comercios porteños también muestran un desempeño bastante superior a los del resto del país. Según Scentia, las ventas para los locales minoristas de Buenos Aires entre enero y noviembre acumularon una baja del 0,9% frente al rojo del 1,6% que muestran los comercios en las provincias.