La economía cayó 1,2% mensual en abril

El nivel de actividad se encuentra todavía un 3,1% por debajo de la prepandemia. Analistas privados estiman que las restricciones para evitar la segunda ola también se verán reflejadas en el dato de mayo. En relación al mismo período en 2020, el crecimiento fue de 28,3%.
Durante abril, la actividad económica se contrajo por tercer mes consecutivo al registrar una merma del 1,2% con relación a marzo en la medición desestacionalizada. Debido a la baja base comparativa, en términos interanuales el EMAE presentó un incremento del 28,3%, para acumular así en los primeros cuatro meses del año un alza del 8,2% interanual.
De cara a lo que viene, se prevé una recuperación en la variación mensual para junio, ya que en mayo los efectos de las nuevas restricciones para contener la segunda ola hicieron mella en la actividad. Las estimaciones privadas proyectan un rebote del 7% para este año.
Dado a que se compara con el mes de cuarentena más estricta del año pasado, la mayoría de los sectores registraron subas marcadas en abril de este año en la comparación interanual. Según informó INDEC, se destacó el alza de Construcción (+221,5% i.a.) y Hoteles y restaurantes (+207,7% i.a.). “La Industria manufacturera (+55,1% i.a.) fue, además, el sector económico de mayor incidencia positiva en el nivel general, seguido por el Comercio mayorista, minorista y reparaciones (+41,9% i.a.)”, señaló el organismo, que por otra parte destacó que “los dos sectores que mostraron caída en la comparación interanual fueron Agricultura, ganadería, caza y silvicultura (-1,9% i.a.) y Pesca (-0,5% i.a.)”.
“En cuatro meses la economía acumula una expansión de 0,5% contra diciembre. Esta suba está enteramente determinada por el crecimiento de enero (2,1% mensual), ya que los tres meses posteriores (febrero, marzo y abril) la actividad se mantuvo en baja (1,6% acumulado)”, analizaron desde la consultora LCG, y agregaron: “A más de año después del inicio de la pandemia, la actividad todavía se ubica 3,1% por debajo del nivel al que operaba en febrero 2020. Desde una perspectiva de más largo plazo, los niveles siguen siendo comparables a los 11 años atrás”.
Lo que viene
Según estimaron desde LCG, durante mayo las nuevas restricciones para contener la segunda ola podrían haber condicionado la actividad, aunque estiman que en junio tendrán el efecto contrario la relajación de las mismas. “Pero más allá de esto seguimos esperando un crecimiento pobre para la segunda mitad del año”, señalaron desde la firma.
“La reapertura de paritarias y la política de ingresos que el Gobierno está incentivando de cara a las elecciones de fin de año podrán empujar el consumo, pero entendemos que lo harán en el margen”, agregó al consultora, que concluyó: “A su vez, la inversión difícilmente sea el componente pujante de la demanda agregada, máxime cuando la actividad todavía mantiene un ritmo cansino, las exportaciones se ven afectadas por la política interna de contener la suba de precios (cupos sectoriales y atraso del tipo de cambio) y la incertidumbre propia de los meses previos a las elecciones juega en contra”.
En ese escenario, desde LCG señalaron que “quedará pendiente ver cuál será el efecto en términos sanitarios y económicos que eventualmente tenga el ingreso de la variante Delta al país”. De todas formas, proyectan una variación positiva del PBI en torno al 6,5% para 2021, algo “apenas por encima del arrastre estadístico que dejó la recuperación de finales del año pasado”.
Al respecto también se refirió el economista de Equilibra Lorenzo Sigaut Gravina en una entrevista con Ámbito días atrás: “Estimamos que la recuperación de este año va a ser del 7%, dos terceras partes del terreno perdido el año pasado. Una de nuestras premisas, por las cuales creemos que este año la recuperación puede ser de 7 puntos, es que las restricciones van a ser acotadas (porque no hay margen social, político y económico para afrontarlas) y tendrán un menor peso para la economía. También es cierto que este año entramos al invierno con prácticamente un tercio de la población vacunada con la primera dosis y por ese lado hay una mejor expectativa. Es un factor adicional por el que vemos que se va a poder evitar un rebrote o tercera ola, y quizá para agosto o septiembre esos meses van a ser de recuperación fuerte. A eso se le suma un Gobierno que va a querer ganar las elecciones y va a poner toda la carne al asador, estimamos un 7% de recuperación en el nivel de actividad”.