La industria cerró 2017 con una capacidad ociosa de más de un tercio del potencial

Las ramas más activas fueron las refinadoras de petróleo, materiales para la construción; metálica básica y papel y cartón.
La actividad industrial en su conjunto recuperó parcialmente el último año la fuerte caída del 4,6% que registró en 2016, al aumentar 1,8%, según la estimación del Indec.
Esa modesta mejora se reflejó con claridad en la tasa de utilización del potencial productivo, la cual, según el organismo oficial de estadística, se ubicó en diciembre último en 64%, apenas 4 décimas de punto porcentual más que un año antes; luego de un pico desde 2015 de 69,2% que anotó en noviembre, después de las elecciones de medio término.
Los bloques sectoriales que presentaron niveles de utilización de la capacidad instalada superiores al nivel general fueron: refinación del petróleo 86,3%, productos minerales no metálicos 76,7%, industrias
metálicas básicas 73,3%, papel y cartón 72,8% y sustancias y productos químicos 68,9 por ciento.
Por el contrario, se ubicaron por debajo de la media fueron la industria del tabaco 61,8%, productos de caucho y plástico 61,5%, productos alimenticios y bebidas 61,2%, edición e impresión 57,8%, productos textiles 55,7%, metalmecánica excepto automotores 55,6% y la industria automotriz 38,3 por ciento.
Las expectativas de los empresarios para el primer trimestre de 2018 que obtuvo el Indec revelaron un aumento de la actividad en una de cada cuatro empresas, mientras que el 13,5% planificó una disminución. El saldo de respuesta fue positivo en 11,5 por ciento de los casos.
Cabe destacar que en el caso de la industria automotriz registró en enero una muy baja utilización promedio de los establecimientos, como consecuencia de las paradas vinculadas con la adaptación de las líneas de montaje para el lanzamiento de modelos, y anticipo de vacaciones que derivaron en que sólo trabajara 10 días hábiles, cuatro menos que el año anterior.